La sospecha es que seis “mareros” armados con hachas las atacaron en represalia porque una de las víctimas era, al parecer, informante policial. En el mismo barrio, otros tres feminicidios ocurrieron el pasado fin de semana.
El triple crimen impactó a El Salvador, pero sólo reflejó una realidad regional cotidiana: por líos domésticos, abusos sexuales, trata de personas, cruentas disputas entre mafias de la delincuencia organizada y choques de “maras”, las mujeres aportan una elevada cuota mortal como víctimas de la crisis que en los últimos años convirtió a Centroamérica en una de las zonas más violentas del mundo.
“La mayoría de delitos quedan impunes y se les ve como algo normal, aunque es injustificable la violencia contra las mujeres”, dijo la salvadoreña América Romualdo, coordinadora de Las Dignas, organización feminista no estatal de El Salvador. El número de feminicidios en El Salvador sumó 592 en 2009 y 580 en 2010, aunque en 2011, con 647, llegó a “la cifra más alta desde 2000”, informó Romualdo a EL UNIVERSAL.
Crisis regional
Guatemala, Honduras y El Salvador reportan numerosos asesinatos de mujeres desde hace muchos años, mientras que Costa Rica y Nicaragua tienen índices menores.
“La violencia contra las mujeres es la principal ‘cara escondida’ de la inseguridad ciudadana” en Centroamérica, advirtió un informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sobre la crisis de una región que, excluyendo los países en guerra, es la más violenta del mundo, con 33 homicidios al año por cada 100 mil habitantes.
“El grueso” de feminicidios, añadió, son resultado de “una larga historia de relaciones abusivas y controladoras por parte de parejas, ex parejas, familiares, pretendientes y acosadores. El resto (…) se derivan de hechos como el intento de violación por parte de un desconocido o el ‘ajusticiamiento’ de mujeres sujetas al tráfico sexual”.
Los feminicidios en Honduras pasaron de 175 en 2005 a 312 en 2008, aunque de 2008 a 2011 hubo mil 700, según la Fundación Rigoberta Menchú (no estatal) de Guatemala. Nicaragua pasó de 37 en 2004 a 89 en 2010 y 76 en 2011, informó la Red de Mujeres Contra la Violencia (no estatal) de Managua. Costa Rica registró 15 en 2009, 10 en 2010 y 40 en 2011, según datos del Poder Judicial.
Guatemala acumula más de 5 mil muertes de mujeres entre 2002 a 2011 y más de 700, sólo en el año anterior.
“(Estas cifras) son la punta visible de toda una violencia estructural”, lamentó la guatemalteca Maya Alvarado, directora ejecutiva de la Unión de Mujeres Guatemaltecas, entrevistada por este diario. “La mayor parte de población en pobreza son mujeres y niñas. De cada 10 embarazadas, cuatro mueren por causas prevenibles y por embarazos y partos mal atendidos”, agregó.
A la violencia contra las mujeres, reprochó Romualdo, se le concede “poca importancia, aunque constituye un problema de seguridad pública”.
Por algo, recalcó, las mujeres optan por el silencio, antes de denunciar.