París, FRANCIA.- Mohamed Benalel Merah, padre del asesino en serie de Toulouse, originario del departamento argelino de Medea, manifestó el deseo de enterrar al más joven de sus hijos en Argelia, su país de residencia, a unos 80 kilometros al sur de Argel, la capital.
"Ya estamos realizando gestiones para llevar sus restos a Argelia y organizar las exequias", indicó el tío materno del conocido también como "el asesino de la moto", Djamel Aziri. Además, Mohamed Benalel Merah amenazó con denunciar al Estado francés por matar a su hijo.
Anunció a los medios que va a contratar los mejores abogados y trabajar toda la vida para pagarles. "Podían haberlo anestesiado, pero prefirieron matarlo", dijo el padre del criminal que mató a sangre fría a siete personas: tres militares, tres niños y un profesor de la escuela judía, en Toulouse y Montauban.
Las reacciones de las máximas autoridades galas no se hicieron esperar. El presidente Nicolas Sarkozy aseguró sentirse indignado por declaraciones del padre de quien califica de "monstruo".
En un tono aún más duro se expresó el jefe de la diplomacia francesa, Alain Juppé: "Si fuera el padre de un monstruo me callaría avergonzado", declaró el canciller a una estación de radio.
Según testigos, el padre del "asesino de Touluse" estuvo más bien ausente en la vida de sus vastagos. El tío materno del islamista abatido, Djamel Aziri, sostiene que éste fue educado exclusivamente por su madre que no ejercía suficiente autoridad sobre Merah, que finalmente se crió solo.
De acuerdo con la versión de Aziri, Mohamed Benalel Merah, de unos 60 años, vio la última vez a su hijo menor en 2010 durante una de sus visitas a Argelia. El tío del asesino cuenta que éste tenía la intención de instalarse en Argelia y fundar ahí un hogar ya que empezaba a sentir un claro rechazo hacia Francia, país que lo vio nacer y donde, según Aziri, su situación social era muy difícil
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