Ex presidente de EE.UU. y contactos extraterrestres


A pesar de que la Casa Blanca niegue rotundamente la existencia de vida fuera de nuestro planeta, el presidente estadounidense Dwight Eisenhower tuvo tres contactos secretos con extraterrestres mediante “mensajes telepáticos”.
Esto lo afirma el ufólogo y ex asesor del Pentágono y del Congreso de EE.UU. Timothy Good, quien revela que Eisenhower -34° presidente estadounidense- entabló contacto con extraterrestres en 1954 en la base de la Fuerza Aérea de Holloman, Nuevo México.

Según Good, Eisenhower, con el apoyo del FBI, habría organizado al menos tres encuentros con los visitantes extraterrestres porque ellos lo pidieron y ante muchos testigos, según informa el diario británico The Mail.

Esta teoría se refuerza con las afirmaciones del funcionario Henry McElroy, quien aseguró en 2010 haber visto un documento secreto remitido a Eisenhower, que notificaba que los “ET” llegaron a Estados Unidos con intenciones pacíficas y deseaban reunirse con el jefe del Estado.

Desafortunadamente, no se conservan las pruebas. En una entrevista de 2007, el ufólogo había asegurado ya que tenía “mucha información sobre bases alienígenas en la Tierra”, incluso de “ubicaciones específicas en los Estados Unidos”.

Habló de una base alienígena en la Cordillera de los Andes y otra en la Fosa de Las Marianas, a 11.000 metros bajo el mar. “En alguna parte de la zanja había una base alienígena muy grande, descrita como enormes globos submarinos que son completamente autónomos, con plantas y seres tipo humano”.

Eisenhower no sería la única personalidad en haber tenido “contacto” con extraterrestres u ovnis. La reina Juliana de Holanda y el príncipe Carlos de Inglaterra aseguraron que extraños objetos en el cielo solían escoltar sus aviones en varios de sus viajes.

Por su parte, el primer ministro inglés Winston Churchill afirmó haber visto un extraño objeto metálico y brillante mientras volaba sobre Alemania durante la II Guerra Mundial. Sobre esto conversó en privado con Eisenhower, en una reunión especialmente dedicada al “fenómeno ovni”. Ambos decidieron sepultar bajo el manto de secreto de Estado sus experiencias.