El norte de la región central de Estados Unidos recibirá lluvias esta semana, con entre 25 y 50 milímetros previstos a lo largo de una franja de tierras cosechadas con maíz y soja y devastadas por la peor sequía en más de medio siglo, pronosticó el lunes un meteorólogo agrícola.
""Hoy hay buenas y malas noticias. Las buenas son lluvias al norte de la I-80 (autopista interestatal 80) con un amplio alcance y temperaturas entre 90 y 95 grados Fahrenheit (32 y 35 grados Celsius)", dijo John Dee, de Global Weather Monitoring.
""Las malas noticias son que seguirá el calor y el tiempo seco al sur de la I-80 y las temperaturas superarán los 100 grados Fahrenheit (37 Celsius) en la mayor parte de Iowa, Misuri e Illinois, con poco o nada de precipitaciones," agregó el meteorólogo.
Los chaparrones llegarán al sur de la región central en los próximos días, con entre 10 y 20 milímetros de agua caída. "Sin embargo, Misuri y el oeste de Iowa podrían quedarse cortos", dijo Dee.
La peor sequía y la más extendida en 56 años produjo daños a las cosechas estadounidenses de maíz y soja, lo que llevó a reducir las estimaciones de producción.
La falta de lluvia estaba empezando a secar los ríos y comenzaba a demorar los envíos fluviales de materias primas a los puertos de exportación en el Golfo de México.
Las precipitaciones llegan demasiado tarde para ayudar al maíz de siembra temprana, que ya se había polinizado en el momento de mayor calor y sequedad, pero el maíz sembrado más tarde y una buena parte de la cosecha de soja del país hallarán un alivio esta semana.
Los futuros de maíz y soja en la Bolsa de Chicago se desplomaban el lunes frente a los pronósticos de un clima más favorable para los granos luego de alcanzar máximos históricos a finales de la semana pasada bajo un calor abrasador y una sequía sin final aparente.
El Gobierno estadounidense recortó en las últimas semanas sus calificaciones de las condiciones del maíz y la soja, y el lunes publicará otra actualización semanal de las calificaciones para los cultivos y de su informe del desarrollo de las cosechas.
Los expertos y analistas bajan progresivamente sus estimaciones de la producción de maíz y la soja casi a cada hora.
Los precios del maíz treparon más de un 50 por ciento en sólo seis semanas en Chicago a un máximo histórico de 8,2875 dólares el bushel.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por su sigla local) del Gobierno estadounidense publicó el jueves un pronóstico que no mostraba ningún alivio ante la sequía, por lo menos para lo que queda del verano boreal.
