NO ACEPTO LAS NORMAS DE GENERO NATURAL!!!!


Nos guste o no, hay pocas cosas que nos llamen más la atención que ver una mujer con pelo en las axilas. El crecimiento irrestricto del vello de las axilas y de las piernas femeninas es considerado uno de los tabúes sociales.


Pero en una sociedad que suele eliminar todo el vello corporal, una mujer ha decidido desafiar la noción de que la mujer no debe tener vello para ser feliz.

La estudiante de posgrado Emer O’Toole, de Dublín, decidió dejar de afeitarse hace 18 meses, cuando llegó a la conclusión de que se presiona demasiado a las mujeres para que se adapten a lo que ella llama "las normas de género artificial".

En el programa This Morning, donde se debatió el tema, O’Toole admitió que comenzó a afeitarse a los 14 años, simplemente porque eso era lo que se esperaba de ella. Pero ahora espera desafiar -y cambiar- las expectativas de este tipo.

"Comencé a examinar mi propia relación con mi cuerpo, y con el pelo de mi cuerpo", dijo a los periodistas Eamonn Holmes y Ruth Langford.

"¿Por qué sentía que debía afeitarme? Me acordé de cuando empecé a hacerlo, cuando me salió el vello a los 14. Entonces no pensé, ¿me afeito o no?, sólo sabía que tenía que hacerlo.”

Sentada a la par de O’Toole, en el programa estaba la dueña de un salón de belleza Michelle Devine, quien dijo sentir disgusto por el pelo corporal.

Devine admitió estar impresionada por la confianza en sí misma de O’Toole y dijo que de chica las jovencitas eran intimidadas en las clases de educación física de la escuela si había muestras incluso de un leve vello.
Como resultado, empezó a depilarse desde una edad temprana, y lo sigue haciendo ahora.

"Me hace sentir femenina", dijo. "No tengo marido ni novio, lo hago por mí misma", apuntó, y la asombrosa cifra de 80% de los espectadores estuvieron de acuerdo, durante una encuesta en vivo.

O’Toole contó un reciente escándalo en Dublín, donde los propietarios de un salón de belleza fueron acusados de ofrecer "pelo de virgen”, una depilación con cera a niñas de 11 y 12 años de edad, alegando que esta acción temprana garantizaría que el pelo de adulto nunca se desarrollaría.
“Este tipo de comportamiento irresponsable está afectando negativamente a las niñas”, indicó.

Después de 18 meses, O’Toole dice que está a gusto con el vello de sus axilas y piernas.
Admite que hubo momentos en los que llegó a ponerse una chaqueta para taparlo, pero insiste que por lo general son las mujeres, y no los hombres, los que se sienten más ofendidos por sus axilas y piernas./Dailymail.co.uk