El actual Gobierno de Chile integrará a las prestaciones de su sistema público de salud las cirugías de cambio de sexo para transexuales, además de modificar los protocolos de atención a estos pacientes en lo que respecta a bancos de sangre, identificación de pacientes e internaciones.
Junto con la integración de las cirugías, se “incluye atención siquiátrica, endocrinológica y quirúrgica para las personas que buscan sanar y recuperar su verdadera identidad sexual”, dijo el ministro de Salud, Jaime Mañalich.
Inicialmente, por su alta complejidad -similar a un trasplante de órganos-, las operaciones de cambio de sexo se realizarán en tres hospitales públicos de las ciudades de Santiago, Concepción y Valparaíso.
“Una persona de escasos recursos no tenía ninguna posibilidad de terminar con su proceso de feminización o masculinización”, explicó a la AFP, el presidente del Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.
El costo de las prestaciones dependerá del tramo de ingreso en que se encuentre el transexual beneficiado del Fondo Nacional de Salud, e incluso podrían ser gratis para aquellos de menores recursos.
“Esto nos pone a nivel del primer mundo en estos temas”, señaló Jiménez.
Recientemente, tras una larga tramitación parlamentaria, Chile aprobó una ley que sanciona la discriminación sexual y religiosa. En el Congreso se discute además una ley para regular las uniones de hecho, que incluye a homosexuales.
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