Rick Warren, uno de los predicadores evangélicos más influyentes en los Estados Unidos, utilizó su Twitter para criticar las nuevas exigencias de la administración de Obama, afirmando que incluso prefiere ir a la cárcel en lugar de cumplir el nuevo plan de salud del gobierno que requiere que todas las instituciones religiosas acepten métodos anticonceptivos, incluidos los métodos de aborto considerados como “Ella” (la píldora de un día después).
Warren, registró su descontento con el gobierno de Obama tres veces diciendo: “Prefiero ir a la cárcel que violar la ley de Dios”, citando Hechos 5, 29 que dice: Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres”.
“Yo no soy católico, pero simpatiza con ellos 100% en colocar su fe frente a la presión del gobierno”.
Warren es el autor del libro:”Una Vida con Propósito”, ha vendido más de 30 millones de copias en 2002, también fue llamado “el pastor de los Estados Unidos “. Sus palabras fueron como una acusación particular contra el presidente Barack Obama, quien lo eligió para que orara por en el día de la inauguración presidencial en el 2009. Sus comentarios son parte de una erupción de leyes estatales que entrarán en vigor a partir del 2013.
El Dr. Richard Land, presidente de la Convención de Ética y Comisión de Libertad la Religiosa de la Iglesia Bautista (ERLC, por sus siglas en inglés), dijo a la revista Time: “no vamos a cumplir con esta ley”, ” queremos que la ley cambie, vamos a escribir nuestras cartas desde la prisión de Nashville, al igual que el Dr. King escribió desde la cárcel de Birmingham”.
Land, instó a sus ministros a “predicar desde los púlpitos que qué tan grave y peligrosa, es esta iniciativa de la Administración Obama”, y animó a sus miembros de la iglesia a ponerse en contacto con sus diputados y sus senadores para que el presidente conozca la profundidad del descontento de la iglesia con esta decisión.
El Dr. Albert Mohler, presidente del Seminario Bautista del Sur, dijo que los cristianos evangélicos podrían ir a prisión. Vemos esto en los próximos meses, advirtió.
Un gran número de iglesias ortodoxas y protestantes se han unido a la Iglesia Católica para formar un frente contra el plan de salud de la Administración Obama, el cual viola la ley de libertad religiosa en el país.