Cerca del 65 por ciento de los entrevistados está de acuerdo en que el precio que Israel pagaría por vivir con un Irán nuclear es mayor que el que supondrían eventuales represalias por un ataque israelí contra las instalaciones nucleares persas. El 60 por ciento se dice convencido de que un ataque militar contra Irán sería suficiente para frenar su programa nuclear.
La misma encuesta llevada a cabo en noviembre del año pasado indicaba una cifra menor de apoyo de los judíos israelíes a un ataque a las instalaciones nucleares iraníes: en torno al cincuenta por ciento.