A pesar de la restricción, Asma, de nacionalidad británica, puede viajar a Ingletarra, sin embargo el Secretario de Estado Británico William Hague dijo que “los ciudadanos que tienen pasaporte británico tienen obviamente el derecho de entrar al Reino Unido, pero dado que estamos imponiendo el congelamiento de los bienes de estos individuos y la prohibición de viaje a otros miembros de la misma familia, no creemos que la Sra. Assad trate de viajar al Reino Unido en este momento.”
Según un oficial de la Unión Europea, también los bienes de dos compañías sirias han sido congelados.
Bashar al-Assad ha estado sujeto a sanciones similares desde mayo de 2011.
“Las sanciones hacen la diferencia en dos aspectos: Primero, apuntan a individuos y entidades de una forma que les previenen de efectuar cualquier negocio y segundo, sirven para enviar un mensaje político sobre el sentir de la comunidad internacional con respecto a lo que está ocurriendo,” dijo Catherine Ashton, líder de política exterior de la Unión Europea.
Según la Organización de las Naciones Unidas (O.N.U., por sus siglas en inglés) más de 8,000 personas han sido asesinadas desde que el levantamiento de rebeldes comenzó en Siria hace un año, sin embargo, fuerzas rebeldes indican que la cifra es de más de 10,000 personas fallecidas.
Desde entonces, la Unión Europea ha realizado sanciones en contra del régimen sirio en doce ocasiones diferentes pero los ataques militares continúan intensificándose en esa región.
Al menos 59 personas murieron el jueves como parte de los ataques en Siria, incluyendo 12 niños y cuatro mujeres, de acuerdo con un líderes de un grupo rebelde.
El gobierno de Siria, por su parte, adjudica la violencia en ese país a “grupos armados terroristas.”
El Consejo de Seguridad de la O.N.U. dijo recientemente en un comunicado que “el gobierno de Siria debe cesar inmediatamente los movimientos de sus tropas y terminar con el uso de artillería pesada en sitios donde existe población,” e instó a que se implementara un plan de paz propuesto por Kofi Annan, de la comisión especial de las Naciones Unidas y la Liga Arabe.
Los 15 países que forman parte del consejo de seguridad expresaron su apoyo al esfuerzo de Annan, incluyendo a China y Rusia, gobiernos que en el pasado han estado en contra de resoluciones que condenan el régimen en Siria.
Alistair Burt, Ministro Británico de Relaciones Exteriores, dijo que la resolución era “una señal clara” de que la comunidad internacional no tolerará las violaciones de los derechos humanos por el régimen de al-Assad.