La representante residente en Senegal del Programa Mundial de Alimentos, Ingeborg Maria Breuer, reveló hoy que se necesitan 54 millones de dólares para resolver la crisis de alimentos y nutricional en este país.
La situación de inseguridad alimentaria es real y grave, y urge el apoyo a la necesidad de movilizar recursos para hacer frente a la emergencia antes de que se convierta en hambre, dijo la funcionaria.
Breuer participó aquí en el segundo taller sobre cuestiones de seguridad, alimentación, nutrición y salud, organizado por el sistema de las Naciones Unidas.
Subrayó que para hacer frente a la situación en Senegal se requiere de esa suma millonaria de dólares y sólo han podido recaudar de ese total 22 millones.
Explicó que en el país existen unas 60 áreas clasificadas como de alto riesgo, y 24 de nivel moderado, mientras la producción agrícola del cereal registró una baja del 36 por ciento en comparación con el año anterior.
La representante del Programa Mundial de Alimentos indicó que dado el alto nivel de inseguridad en la mayoría de las zonas visitadas y el aumento de los precios de los principales alimentos, deben adoptarse medidas para reducir el impacto en las familias.
En ese sentido sugirió la creación de bancos de cereales y el fortalecimiento de las reservas existentes, distribuir alimentos donde la situación lo requiera y apoyar con la donación de semillas, fertilizantes e insumos agrícolas para la cosecha de 2012-2013.
Por su parte, el representante residente de la FAO en Senegal, Ouattara Amadou, manifestó que la institución necesita siete millones de dólares para hacer frente a la inseguridad alimentaria.
Indicó que la institución tiene el propósito de llegar a 30 mil hogares y si es necesario ir más allá hasta cubrir las ocho regiones.
PrensaLatina