EL Derrame de Petroleo aun fuera de control - Llega a las costas de Luisiana






Una mancha de petróleo de gran tamaño llegó el viernes a la costa de Luisiana, en Estados Unidos. El crudo, derramado tras un accidente en una plataforma petrolera del Golfo de México, habría llegado a una isla del delta del Mississippi, según le dijo a la BBC un funcionario local.
El gobernador del vecino estado de Florida, Charlie Christ, declaró el viernes el estado de emergencia en varios condados, a los que se espera que la mancha de petróleo llegue en las próximas horas.
Seguir Leyendo... Luisiana ya había declarado antes el estado de emergencia para hacer frente al derrame.
Los estados de Mississippi y Alabama también están amenazados por el derrame que avanza hacia sus costas.
Según los expertos, esto podría convertirse en el peor desastre ecológico de Estados Unidos y tiene el potencial de afectar a cientos de especies que viven en el litoral, además de perjudicar la pesca y la economía de la región.

En tanto, la Casa Blanca prohibió las perforaciones petroleras en nuevas áreas de la costa hasta que concluyan las investigaciones en torno a la explosión y posterior hundimiento de la plataforma Deepwater Horizon operada por la compañía British Petroleum (BP).

Por su parte, el presidente Barack Obama hizo hincapié en que la compañía pagará por la limpieza de la mancha de petróleo.

OLOR A PETROLEO

Algunos residentes de áreas costeras le confirmaron al corresponsal de la BBC en Luisiana, Andy Gallacher, que ya se podía oler el petróleo. Por ejemplo Margaret Guidry, de Nueva Orleans, calificó el aroma de "apestoso".

Otros expresaron su preocupación por los pantanos de la zona, que tanto han demorado en recuperarse tras el impacto del huracán Katrina. Otros mostraron su inquietud por el impacto en la economía local.

Kamah Asha Wilson Gonzales, de Luisiana, le comentó a la BBC: "Me preocupa nuestra industria alimenticia , pero a la vez me alegra saber que esto es prioridad para el gobierno".

"Duro golpe"

Ashleigh Cox, de Alabama, que es dueña de un restaurante de mariscos, dijo que no sólo podía oler el petróleo, sino que además un pescador que abastece a su local le advirtió que su negocio podría quedarse sin pescado durante las próximas semanas.
"No se ha pescado en estos días y tampoco tendremos turistas que vengan a aguas contaminadas. Esto va a significar un duro golpe a nuestra economía personal y local, tan cerca de los meses de verano", advirtió Cox.

Unos 5.000 barriles de crudo -cinco veces más de lo que se pensaba- se vierten diariamente en las aguas del Golfo de México.

Once trabajadores siguen desaparecidos, aunque se presumen muertos.

Obama anunció que se desplegarían "todos los recursos disponibles" para ayudar a contener el derrame. La marina fue enviada para tratar de prevenir un inminente desastre ecológico.

"Importancia nacional"

"Esto es muy, muy serio", expresó David Kennedy, de la Dirección Nacional para la Atmósfera y Océanos.

El jueves se declaró una temporada de emergencia de pesca de camarones, para permitir que los pescadores lleven su producto a tierra antes de que se contamine con petróleo.

También el jueves, el gobierno estadounidense calificó el derrame "de importancia nacional.

La medida permite movilizar los recursos necesarios para tratar de aliviar las consecuencias de la mancha de crudo.

El gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, declaró el estado de emergencia y pidió el envío de uno 6.000 efectivos de la Guardia Nacional para ayudar en las labores de limpieza.

La costa de Luisiana, la más amenazada por el derrame, es rica en criaderos de ostiones y camarones.
Noticias2012